Remates hipotecarios:
Consisten en un proceso judicial en el cual se ordena el remate de un bien raíz debido a que su propietario fue demandado por dejar de pagar la hipoteca bancaria. Por tanto, el remate bancario surge de manos de la entidad bancaria en un intento de recuperar parte de la inversión que realizaron en forma de hipoteca y que no volverá por ese cauce.
En sí, se trata de un proceso ordenado por un juez civil que dicta una sentencia ejecutiva. Para el comprador no conlleva gastos adicionales a los de cualquier otra adquisición.
Los remates inmobiliarios te permitirán encontrar propiedades en venta hasta por el 40% menos de su valor en el mercado, Fuente: Viva Anuncios.
¿Cómo funcionan los remates?
Los inmuebles en conflicto se ponen a disposición de un juzgado quien da a conocer públicamente a través de edictos judiciales dichos inmuebles, su ubicación, características, fecha y precio del remate para que los interesados puedan adquirirlos. Para tal fin el interesado deberá primero presentarse a BANSEFI para comprar un billete de depósito por el 10% del valor del inmueble señalado en el edicto para poder entrar en la subasta.
Una vez que se compra el billete, la persona se presenta en el juzgado en la fecha y hora fijada en el edicto para presentar su postura. La persona que más ofrezca por el inmueble, se lo queda.
¿Cómo te puedes informar de los remates inmobiliarios?
A través de los edictos judiciales que se ponen a la vista en los juzgados, en periódicos de mayor circulación, en sitios web de los juzgados, o en los bancos.
En Adamantine, puedes acceder a la lista de inmuebles disponibles sin necesidad de esperar a un remate.